La esencia de Chiloé está en los tradicionales palafitos, iglesias y los auténticos mercados artesanales de Castro, un antiguo bastión del gobierno de Chile en el siglo XVI, que se utilizaba como puerta de entrada antes de que la isla fuera una extensión del continente. Es toda una aventura descubrir la historia y las influencias culturales de Castro.
Para conocer la capital de la isla con sus tradicionales palafitos, nuestro recorrido seguirá las mareas. Conoceremos el pintoresco Mercado Yumbel, donde podemos ver los más típicos productos de la zona: papas chilotas, ajos gigantes, cestería, tejidos y una gran variedad de frescos productos del mar.
Visitaremos la postal más clásica de Chiloé con sus coloridos palafitos, para recorrer su encantadora calle principal con pequeñas tiendas de artesanía y locales comerciales que conservan sus tejuelas de madera. Visitaremos la Iglesia San Francisco, el principal templo católico de la capital, declarado Monumento Histórico Nacional y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
También visitaremos el astillero de ribera -donde se construyó nuestra propia embarcación “Williche”, para ver la construcción de barcos locales. Finalmente llegaremos a la Iglesia de Nercón, valioso testimonio de la reconocida Escuela Chilota de Arquitectura en Madera.
