Flora y fauna en Chiloé
Su enorme variedad de flora y fauna, tanto endémica como introducida es tan extensa que incluso Charles Darwin se sorprendió durante su visita en 1834. Chiloé cubierto de una exuberante vegetación en todas sus islas, con bosques valdivianos llenos de mirtos, robles, bambús, avellanos y canelos , entre muchos otros. La diversidad de estos árboles narra una historia de evolución natural en la isla, que se inicia hacia fines de la era de hielo 15.000 años, hasta la época colonial en la que nuevas especies llegaron por barco, y que se extiende hasta nuestros días. Puedes aprender todo acerca de este enigma botánico en primera persona en nuestras excursiones informativas, donde caminarás por parte del Sendero de Chile.
Además de frondosos bosques, Chiloé es también hogar de una docena de humedales, incluidos el humedal de Pullao, que está justo al lado del hotel. Reconocido por la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras como un “sitio de importancia hemisférica”, este santuario sirve como hábitat para una asombrosa variedad de vida silvestre, entre los que encontramos al zarapito de pico recto y el zarapito común, ambas especies migratorias muy protegidas. Durante nuestra excursión al humedal de Pullao, también pueden apreciarse cormoranes, patos y gaviotas.
En Chiloé, te acercarás a una impresionante variedad de vida animal, como extraños marsupiales, el pudú -uno de los ciervos más pequeños del mundo-, el zorro chilote y el gato Güiña. En el agua, encontramos delfines, cisnes de cuello negro e incluso, con un poco de suerte, ballenas. El archipiélago es realmente un refugio para la biodiversidad, albergando todo tipo de vida salvaje.